De manera oficial los nuevos sellos negros en los etiquetados de los productos nacionales y extranjeros que consumen las y los mexicanos, serán obligatorios. El objetivo es que cada sello informe de forma sencilla a los consumidores finales, el contenido exacto de: nivel de grasas, saturadas, transgénicos, azúcares, sodio, calorías y otros ingredientes críticos que ponen en riesgo la salud.
La diputada local Mayela Salas celebra la modificación de la norma sanitaria (NOM-051), aprobada por el poder legislativo y publicada en el Diario Oficial de la Federación el 27 de marzo del año en curso, que a partir del 1 de octubre por ley las y los mexicanos, podrán saber exactamente qué es lo que contienen alimentos y bebidas desde los anaqueles de venta, y decidir así, bajo conocimiento el consumo o no de los mismos.
Señaló que México está dentro de los primeros lugares a nivel mundial de obesidad en la población, entre otras enfermedades crónicas como diabetes, hipertensión, colesterol, muchas de ellas derivadas de los malos hábitos. Que si bien, una cultura de poca consideración al cuidado alimenticio influye, también es importante la información en productos «chatarra» o incluso de consumo básico; que no advierten sobre los excesos de sus contenidos.
Como dato informativo, la legisladora agregó que se considera que un alimento tiene exceso de calorías si en 100 gramos o en 100 mililitros de producto hay 275 kilocalorías o más; exceso de azúcares si tiene 10% o más de azúcares libres; exceso de grasa saturada si tiene 10% o más de energía proveniente de grasas saturadas; exceso de grasas trans si contiene 1% o más de estos nutrimentos; y exceso de sodio si tiene 1% o más de sodio.
Dijo para finalizar, que además de los sellos negros con las especificaciones señaladas y las leyendas precautorias correspondientes, también será obligatoria la modificación en la barra nutrimental y lista de ingredientes, con la información de ingredientes añadidos, para conocer la cantidad exacta de azúcares agregados en los productos durante el proceso de fabricación. Asimismo, el contenido nutrimental se reportará en porciones de 100 g o 100 ml, para facilitar la comparación entre otros.
Concluyó.